La transformación digital implica realizar una serie de cambios tecnológicos. Existen numerosas herramientas que están al alcance de las pequeñas y medianas empresas. A la hora de aplicarlas, no pueden ser elegidas al azar, sino que se deben seleccionar las mejores alternativas en base a los objetivos y estrategias de la organización, así como de la cultura corporativa.

Con el crecimiento de herramientas con aplicaciones para Internet de las Cosas uno de los sectores que más ha impulsado la digitalización de las empresas son las posibilidades que esta ciencia aporta para interconectar todas ellas gracias a la red. Pueden intercambiar registros, activar eventos que impliquen una serie de automatizaciones que mejoren los procesos internos y las propias estrategias de una empresa.

La web debe contener información clara y concisa acerca de lo que hace la empresa: qué es lo que hace, qué problemas resuelve el producto y/o servicio, beneficios, factor de diferenciación y forma de contacto. Hay que enfocarse en lo que el público objetivo necesita.

Uno de los aspectos más relevantes en la creación de una página web es lo que se conoce como “navegación corta”. Tal y como su propio nombre indica, consiste en que la web no tenga demasiadas subpáginas en la navegación. La clave es no tener más de cinco o siete apartados en la navegación principal para que el sitio se vea más compacto y los usuarios encuentren lo que buscan en segundos.

Por supuesto, hay que trabajar el SEO para mejorar el posicionamiento de la web en los principales buscadores, como Google. Para ello, resulta de gran utilidad contar con un blog como valor agregado en el que se publican temas de interés relacionados con la actividad comercial del negocio.

Según revela el ‘Estudio E-commerce 2021’ de IAB Spain la penetración de la compra online creció en 2021 hasta alcanzar el 76% de los internautas españoles de 16 a 70 años (72% en 2020). Lo que, en términos absolutos, supone que 25,8 millones de personas ya compran online en España.

Un informe realizado por la OC&C Strategy Consultants afirma que, para 2025, el e-commerce aumentará un 15% y representará entre el 40% y el 50% del gasto total. Este aumento del comercio electrónico provocará un incremento en las ventas y un cambio en el perfil del consumidor.

Los Google Shopping Ads son un formato de publicidad online optimizado para generar venta. Cuando los usuarios buscan un producto, se le muestran sugerencias de productos relacionados.

Es precisamente en la página de pago donde se producen más abandonos, así que es recomendable poner en práctica las siguientes técnicas: proceso de pago limitado a una sola página, información clara sobre los gastos y plazos de envío y formas de pago.

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